Malvada diversion

Anne me soltó y despues cai rendida en la cama, apenas lo habia visto hace unos dias y ahora estaba muerto, desmembrado y hechado sus partes al fuego, me imaginaba como habia sido, yo misma antes habia hecho eso, era fatal.

Adam, mi Adam, el chico que decia ser mi amor por siempre, aquel que me esperaba, aguardaba por mi, soportaba mis infidelidades y caprichos, él, quien siempre fiel a mi, jamas intento engañarme y yo de tonta que nunca lo valore.

Tenia que averigurar porque lo mataron, pero solo Aro lo sabria..mmm...¿como sacar la verdad?

-Lo siento tanto Marian.- Anne aun estaba a mi lado, las lagrimas le salian de los ojos.

-Tranquila Anne.- aun asi tenia la fuerza para no llorar.- No es tu culpa.- puse mi mano sobre su mano en gesto de amistad.

-¡Noo!.- Anne se sacudió mi mano de su hombro.- ¡Si es mi culpa!.- sollozaba.-¡Yo lo pude evitar!.- seguia.

-¿De que hablas Anne?.- no entendia nada.

-Aro me encargo vigilar a Adam y yo no lo hice, lo deje pasar, despues Aro me mando contigo y ya no supe de él.- Anne se sentia culpable de su muerte.

-Anne tu no lo mataste, fueron ellos.- le consolaba.

-¡Tu no entiendes!.- me saco de onda.- ¡Era mi responsabilidad, mi tarea!.-

-Pero tu no lo mataste.- le di un pañuelo.- ¡Asi que deja de culparte!.- creo que subi mi tono.

Anne calmo su sollozo y me miro sorprendida.

-Deja las lagrimas Anne.- le ordene.- Que ya nada se puede hacer, mejor dejarlo ir ahora, antes de que el sentimiento se apodere de ti.- me pare de la cama y me fui a ver al espejo, me veia mal, las mismas ojeras de siempre, le di poca importancia y me lave la cara, acomode mi cabello y me vesti con mis jeans y una blusa que Anne hizo favor de traerme, me coloque los zapatos y me dirigi con Anne.- Será mejor que arreglemos esto.- le sugerí; ella bajo de la cama y se fue al baño, yo tendí la cama y me fui ala biblioteca a desaburrirme mientras Aro llegaba.

Tome el mismo libro y lo leí por encima, la verdad no tenia muchas ganas de leer, de eso y de nada, no queria llorar, abatirme y sentir que el mundo se caia solo porque ya no tendria a Adam, no queria, no queria ser hipocrita, lo sentia, pero sabia que si no se lo demostre mientras que existia, ¿por que llorar ahora que no existe?, no tenia sentido alguno, bueno, para mí.

-¡Marian!.- Anne me gritó desde el cuarto.- ¡Aro llegó!.- que rapido.

Entre al cuarto y ahi estaba Aro como siempre sonriendo, a su lado sus guardias y Anne sentada en la cama.

-Buenos dias Aro.- fingi una sonrisa.- ¿Que haremos el día de hoy?.-

-Vaya, que gustosa el día de hoy querida.- Aro estaba sorprendido.- Pero antes.- cambio su tono de voz.- Te tengo una mala noticia...emm..tu novio, Adam, ah cometido un crimen y ayer fue castigado por ello.- me miró preocupado por mi reaccion.

-Oh, lastima, ¿que ha hecho?.- lo tome como cualquier problema.

-Descubrimos que trataba de escapar, por fortuna no lo llevo acabo.- me explicó.

-¿Y eso merece la muerte?.- me delate yo sola.

-Claro que no mi niña, pero descubrimos que no solo él planeaba escapar, sino que mas de los elegidos estaban con él, eso si merece la muerte.- al parecer lo dejo pasar.

-Lo lamento por ellos.- camine hasta llegar a la cama y sentarme junto a Anne.-¿Que tema tienes que tratar conmigo entonces?.- queria pasar desapercibida.

-Como siempre querida vas al punto.- me halago.

-No me gusta perder mi tiempo.-

-Claro, el dia de hoy entrenaremos en la sala, asi que siganme por favor.- nos guió hasta la puerta detras de la cortina y las dos caminamos por la obscuridad hasta llegar a la sala, ahi estaba la guardia esperandonos.

-Explicame Aro, ¿que haremos?.-

-Calma querida, esta vez ayudare a que tu don cresca y lo puedas dominar.- Me sentó en un sillon y le ordeno a alguien de la guardia que se sentara en el otro, me pidió me concentrara; puse toda mi atencion en él chico y sentia como fluia, poco a poco senti ese fuego, esa flama que se encendia, utilize el coraje que sentia y lo deje fluir hacia él......y lo hice, ¡lo hice!, él chico se desmayo y yo abri los ojos, todos se juntaban a su alrededor y Aro me veia feliz, con avaricia. Sabia que ahora que mi don aumentaba de poder, no me dejaria ir.

-Creo que es suficiente por hoy.- me pare y camine hasta la puerta, la guardia me detuvo.

-Tranquila querida, como prometí te llevaré al castillo siendo que mañana es tu ultimo día con nosotros.-

-Claro.- accedí y deje que me guiaran hasta la salida, donde fuera de la casa nos esperaba un auto negro con los vidrios tintados, enseguida subimos y nos llevó hasta el aeropuerto donde subimos al avion, primera clase, no esperaba menos de ellos, yo viajaba con Anne, ambas custodiadas por la guardia.

-Al llegar llamare a los Cullen, deben de saber que estaras en el castillo y que mañana saldras, para que te recojan, yo espero unirme con ustedes despues.- Anne me dijo al oido.

-Tranquila Anne, todo estara bien.- le sonrei y despues voltee a ver el hermoso paisaje que se me presentaba desde las alturas.

Pasaron las horas y me sentia aburrida, asfixiada, llegariamos al siguiente día, el viaje apenas llevaba unas horas y ya era de noche, no tenia intenciones de fastidiarme sin hacer nada.

-¿Quieres ver algo?.- le pregunte a Anne, quien quitó la mirada de su Blackberry y me prestó atención.

-Muestrame.- respondió.

-Observa esto.- me consentre lo mas que pude y sentia el fuego correr por mis venas, cerre los ojos y me figure a los guardias, excepto a Anne, y al abrir los ojos todos estaban desmayados a nuestro alrededor, si que era divertido.

Anne estaba asustada y yo no paraba de reir.

-Deja eso, nos pueden hacer algo.- Anne estaba algo alterada.

-No te preocupes, ya estoy manejando esto, en unos cuantos dias me saldra a la perfeccion.- me calme y seguí observando por la ventanilla.



Chicas es poco, lo se, pero no se me ocurre mas, espero publicar pronto, lo siento.

Con cariño.........Mary Anne*